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El precio del gas ha subido en casi un 800% desde marzo de 2021, cuando aumentó drásticamente el coste del megavatio hora. De costar 17,36 euros el mWh, pasamos a pagar 159 euros el mWh el pasado mes de septiembre. ¿El motivo? Debido a la guerra entre Rusia y Ucrania, el precio se ha cuadriplicado por el desajuste entre la oferta y la demanda.

Para reducir el consumo del gas, 27 países de la Unión Europea, entre ellos España, han limitado la temperatura de la calefacción a 19 grados en invierno, aunque solo en edificios públicos, establecimientos comerciales, espacios culturales, estaciones y aeropuertos. Esta medida será temporal, y estará en vigor hasta el 1 de noviembre de 2023.

La norma también busca fomentar la sustitución de los combustibles fósiles por renovables, acelerando la tramitación de las instalaciones y disminuyendo los requisitos. Pero ¿qué sistemas de calefacción pueden emplearse para reducir el consumo del gas e impulsar la sostenibilidad en nuestros hogares? ¡Te lo contamos!

4 sistemas de calefacción sostenibles para el hogar

1- Energía solar para calentar la casa

La energía solar es una de las principales fuentes de energía sostenibles. El sistema de climatización ideal para los hogares españoles es mediante la instalación de placas solares, y es que en España disfrutamos de más de 300 días de sol al año. Este tipo de sistema de calefacción puede ser una buena alternativa tanto para viviendas unifamiliares como para edificios.

Es cierto que la inversión inicial acostumbra a ser importante, pero compensa a largo plazo. Según los expertos, la instalación de placas solares permite ahorrar en las facturas entre un 40% y un 60%, lo que traducido en euros se aproxima a los 700 euros al año. Existen varias posibilidades para aprovechar la energía solar en el hogar:

• Paneles fotovoltaicos: sirven para producir electricidad, por lo que te permiten generar calor en sistemas de calefacción eléctricos.
• Paneles térmicos: este tipo de paneles sirven para calentar agua sanitaria y se emplean como apoyo a la calefacción.

2- Sistema geotérmico como climatización en el hogar

Los sistemas de calefacción geotérmicos o las bombas de calor geotérmicas aprovechan la energía y el calor de la tierra, que permanece a una temperatura estable. Se trata de sistemas muy ecológicos, eficientes y sostenibles que tienen una gran ventaja: funcionan con el calor que se extrae de la tierra, por lo que usan menos energía para calentar el ambiente, lo que incrementa la eficiencia energética de la vivienda.

Pero hay un inconveniente, es una instalación cara y se suele emplear en casas y no tanto en edificios. No obstante, a largo plazo suele salir a cuenta por el ahorro en las facturas de la luz. El sistema geotérmico es capaz de refrigerar en verano y calentar la casa en invierno a través del proceso de intercambio de calor, una fuente de energía limpia y renovable que apenas emite CO2 a la atmósfera.

3- Calefacción de biomasa

La biomasa es una energía que se genera a través de dos tipos de combustible: los pellets y la leña. Por un lado, las estufas de pellets son una forma muy habitual, económica y sostenible de calentar la casa. Esta forma de calefacción funciona con materiales económicos biodegradables como el serrín, las astillas u otros residuos orgánicos).

Por otro lado, están las estufas de leña, que utilizan la leña como combustible proveniente de árboles o arbustos. Los nuevos modelos de estufas de leña que se instalan en las viviendas son más eficientes y ecológicos que los tradicionales. Además, pueden ser lo suficientemente potentes como para calentar una vivienda entera.

Ambos combustibles de biomasa cuentan con un rendimiento mayor al del gas o la electricidad, explican desde EcoForest. No obstante, hay que destacar que el principal inconveniente de este sistema de calefacción es que hay que instalar en la vivienda un sistema de ventilación con chimenea, por lo que suele verse más en viviendas unifamiliares.

4- Bombas de calor aerotérmicas

Finalmente, las bombas de calor aerotérmicas. Se trata de sistemas que utilizan la termodinámica para generar calor o frío en las viviendas, y funcionan con un consumo eléctrico mínimo. Según los expertos, las bombas de calor aerotérmicas pueden ahorrar hasta un 80% en la factura de la luz.

Pero ¿cómo funcionan exactamente? Las bombas de calor aire-agua, a diferencia de un aire acondicionado que extrae el calor del aire y lo transmite a través del aire, son capaces de extraer el calor del aire y calentar el agua caliente sanitaria (ACS). Estas son algunas de las ventajas de la aerotermia:

• No emiten CO2 a la atmosfera
• Son una fuente de energía renovable
• Requieren de poco mantenimiento
• Ocupan muy poco espacio en casa

Sea cual sea la alternativa que elijas como sistema de calefacción en tu hogar, asegúrate antes de tener un buen aislamiento en la vivienda, sin fugas en ventanas, puertas o conductos.

*Fuente:Fotocasa.